Todas las afirmaciones alimentan tu subconsciente para que empiece a trabajar en pro de alcanzar el objetivo, la razón por la que a las personas le fallan las afirmaciones es porque no tienen suficiente paciencia, no es de la noche a la mañana, requiere un tiempo sizeable en permitir que el subconsciente absorba las afirmaciones.
De allí el poder de las palabras, cada afirmación equivale a visualizar un resultado. Y algo en lo que todos los líderes espirituales coinciden es que te conviertes en lo que piensas. No te pierdas el artworkículo sobre «te conviertes en lo que piensas».
Las palabras tienen un efecto creador, de acuerdo con el pensamiento hindú, una vez que declaras algo diez mil veces, se convierte en un mantra. Una palabra repetida frecuentemente moldea y da forma a tu futuro.
“Por la palabra de Jehová fueron hechos los cielosY todo el ejército de ellos por el aliento de su boca”
Otro punto importante es afirmar en presente, quieres que tus palabras declaren que ya es un hecho, en tu mente ya eres una persona financieramente libre y en tu peso excellent.
“Por lo cual también nosotros sin cesar damos gracias a Dios, de que cuando recibisteis la palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como palabra de hombres, sino según es en verdad, la palabra de Dios, la cual actúa en vosotros los creyentes”
Que nuestras palabras sean siempre palabras de amor, aliento y verdad, glorificando a Dios y edificando a aquellos que nos rodean.
La Biblia nos enseña que nuestras palabras tienen un poder significativo. Podemos edificar o destruir con lo que decimos, y por lo tanto, debemos ser conscientes de cómo nuestras palabras pueden afectar a los demás.
El poder de las palabras no debe subestimarse. Nuestras palabras tienen el poder de cambiar vidas, de sanar corazones y de transformar situaciones.
Otra forma de usar nuestras palabras de manera constructiva es practicar la empatía. En Efesios four:29, se nos insta a «no decir ninguna palabra mala, sino sólo la que sea necesaria para edificar, según la necesidad del momento, para que imparta gracia a los que escuchan».
Cuando estas personas ostentan un cargo de responsabilidad, en el ciudadano crean una mezcla de rabia y tristeza e impotencia. Rabia porque el representante público tiene el deber de darle sentido a la comunicación que hace de sus acciones y propuestas.
Tenemos la responsabilidad de utilizar nuestras palabras para edificar y beneficiar a los demás, reflejando un corazón transformado por el amor y la gracia de Dios. Además, debemos utilizar nuestras palabras para dar razón de nuestra fe y comunicar el evangelio de manera clara y convincente.
El poder de las palabras según la Biblia es innegable. Podemos ver el impacto de las palabras en nuestras vidas y en la vida de los demás. Por lo tanto, debemos ser conscientes de cómo utilizamos nuestras palabras y utilizarlas para glorificar a Dios y bendecir a los demás.
siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por more info la palabra de Dios que vive y permanece para siempre. Porque: Toda carne es como hierba, Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba.